Vídeo 16 - La locura de las ciudades en África

Estrenado el: 25/01/2024

Josep 16
Intro

El equilibrio y la relativa paz que se respiran en muchas aldeas de África se rompe por completo en las grandes ciudades.

Todo se vuelve un caos, difícil de explicar con palabras.

CARÁTULA
16 - La locura de las ciudades en África

Todo lo agradable, tranquilo, equilibrado de las aldeas, (es verdad que no sobra, pero tampoco falta, es aquella vida, simple) pero en las ciudades no es así: todo se vuelve desequilibrado, todo es caótico, estresante, peligroso, en las grandes ciudades.

En algunas ciudades más caóticas (como por ejemplo me acuerdo ahora de Kinshasa, la capital de la República Democrática del Congo, más al sur) las calles parecen no tener una dirección para los coches, pues andan por todos los lados, en todas las direcciones y sentidos. Llegamos a ver, en grandes avenidas, un carril que va, y otro al lado que viene, pero al lado otro que va y otro que viene. Es decir: en la misma avenida podemos encontrar 5 o 6 carriles, Lo que ya es el no da más es llegando en las rotondas [risas]. Es la ley del más fuerte. Los autobuses, por ejemplo, van apretando y empujando, poco a poco, con esa elegancia, cruzándose con los pintorescos taxis de color llamativo que hay en cada país. En Nigeria todos son naranja, de este color ámbar, alegre.

Uno se va acostumbrando a encontrar mendigos pidiendo algo por todos lados. Uno se pregunta: ¿cómo puedo ayudar a toda esa gente?

Muchas personas desdentadas, madres con adolescentes discapacitados (sin sillas de ruedas como las nuestras en occidente, por supuesto), niños muy pequeños pidiendo comida, moviendo los 4 dedos delante de su boca. Esta forma de pedir comida, esta forma de decir que uno tiene hambre en muchos países en África...

Varios tipos de enfermos con enfermedades expuestas, deformaciones, amputaciones, grandes llagas, tumores... Algunas personas andan arrastrándose, algún leproso te pide limosna; mujeres con niños muy delgados se te acercan pidiendo comida con la mano.

Ciegos conducidos por jóvenes o niños pequeños. Personas sin ojos, personas sin lengua, alguien con una llaga tan enorme en el rostro que no se distigue su cara...

Puede ser que ahora, después de 40 años, todo esto haya mejorado un poco. Aunque regresé a África dos veces hace algunos años y no había cambiado tanto, muy poco.

Es interesante que, si buscas información gráfica, será difícil que encuentres imágenes de este tipo. Como te decía antes: ellos no admiten que les fotografíes. A esa altura, Lluís ya había aprendido la lección e iba con mucho cuidado. Aparte de que el policía nos lo advertía repetidamente. ¡Cuidado con las fotos! ¡Es peligroso!

A nosotros tampoco nos gusta ver personas deformes en nuestras calles.

Yo me acuerdo que cuando era niño fuimos una vez a un lugar llamado Cotolengo en el Carmelo, dónde había toda clase de niños deformes. Yo me acordé en África de esto. Niños que -perdona la expresión- 'quedaban mal' por la calle. Quedaban mal en la vida social. Estaban allí, recluidos.

Hoy, nos hemos vuelto más sofisticados y muchos de esos niños son analizados en el embarazo y -perdona: no se me ocurre una palabra más apropiada- se les mata para que no nos cause molestia.

IMÁGENES Y MÚSICA DE IMPACTO.

Sigo con las ciudades africanas.

La comida ambulante es otra constante. Y me salió un ripio.

Las calles de las ciudades están repletas de puestos de comida callejera. Es fácil ver personas de todas las edades cocinando al carbón o a la leña, mucho humo, sin iluminación por la noche, todo oscuro, solo la lumbre de las brasas, alguna vela, un olor penetrante de especies fuertes; al principio olores ofensivos a nuestros olfatos occidentales, después, uno se va acostumbrando...

Con toda esta situación tan caótica, las personas -contrariamente a lo que puedas esperar (a no ser que hayas viajado a lugares parecidos)- las personas, en su mayoría, son amables, alegres, tranquilas, dispuestas a ayudarte si se lo solicitas, ayudar a cualquiera que se lo solicite. Muy diferentes de las personas en los países occidentales. Diametralmente diferentes. Al principio, para mí, esto era chocante. Creo que ya te lo hablé en otra ocasión...

Si tú te muestras alegre, la mayoría de personas te sonríe, incluso en situaciones de enfermedad y de extrema pobreza. Si tú les sonríes, ellos te sonríen, mostrando sus dientes.

Lo digo con cariño, no como burla, por supuesto. Desde Argelia nos acostumbramos a ver el aspecto asustador de muchas dentaduras, que se muestran al sonreir. Decir que los dientes están sucios no sería la palabra. Mucho más. A más edad, como es lógico, el aspecto se va complicando. Y cada vez con menos dientes. Pobres. Los dentistas es cosa de ricos (hay algunos ricos, muy ricos, un contraste sobrecogedor, muy ricos, pero pocos, pero inmensamente ricos, entre una multitud de pobres).

Como te decía, principalmente en Argelia, pero en Argelia me acuerdo perfectamente porque fue lo primera vez que lo vi y me chocó, muchos hombres se pasan la vida mascando tabaco, horas y horas, y los dientes, pues, imagínate, como quedan [risas].

Todo esto es difícil de explicar...

Pero todas estas personas son entrañables, se hacen querer sin hacer nada. No te lo sé explicar y creo que puede ser que te parecerá incoherente.

Vídeo Josep 16
Escena 2
Kano destaca entre muchas ciudades

La carretera para dirigirnos a Camerún, pasaba por Kano, la segunda ciudad más poblada de Nigeria. En el 1983 se acercaba al millón y medio de habitantes; hoy son más de 4 millones (más del doble que la Barcelona de hoy, por ejemplo).

En algún consulado o embajada desaconsejaban rotundamente pasar por Kano.

Actualmente, según tengo entendido, es totalmente imposible viajar por esas carreteras del norte de Nigeria. En los últimos años, los grupos musulmanes terroristas aumentaron. El riesgo de secuestro es alto y la violencia muy frecuente.

Y, entre todas esas ciudades, Kano destaca.

Me gustaría detenerme un poco para hablarte de Kano. Seré breve.

Todo lo dicho hasta ahora sobre las ciudades en África se aplica perfectamente en Kano.

Un ciudadano nacido en Kano que vivió en Lagos algunos años, al regresar a su ciudad natal opinó que la vida en Kano es todavía más dura que en Lagos. Solo recordar que en aquel entonces Lagos era considerada la ciudad más peligrosa del mundo, puede ser porque, quien hizo la estadística, solo contabilizó las capitales y, con seguridad, no pasó por Kano [risas].

Pocos viajantes occidentales se atreven a andar por sus calles.

Como en todas las ciudades de mayoría musulmana, las mujeres van con la cabeza cubierta. Los hombres con su vestido típico. La gente es amable pero distante. Te mira con cara seria, sin expresión. Pero, si les sonríes, como te dije, buena parte también te sonríe. Otros te miran serio, sin pestañear.

En Kano y alrededores destacan los grupos de niños que andan por las calles con sus tazones de colores buscando algo para comer o para vender. Interesante: muchos de ellos que están en una absoluta miseria, perdón, miseria no, en una absoluta pobreza, van cantando y, a menudo, sonriendo. Es difícil de explicar.

La pobreza, la enfermedad o los matrimonios desechos de sus padres, les impulsan para sobrevivir con lo poco que reciben de algunas personas que se apiadan de ellos. Muchos comparten después, lo que consiguieron, con su familia.

Algunos de ellos serán delincuentes, yo no cre oque todos; muchos de ellos no van a la escuela, llevan ya enfermedades en sus cuerpecitos; algunos, eso sí, no llegarán a la adolescencia.

Y, a pesar de todo esto, son educados, humildes, respetuosos... Todos ellos creen en la existencia de 'algo' que les ayuda en la vida (ellos le llaman Al-lāh). Esto les hace tener confianza en el futuro (a pesar de no tener nada), esto les hace ser alegres, simpáticos... Difícil de explicar. Cualquier moneda, cualquier regalo, cualquier gift [risas] les hace felices, al extremo.

Contemplando todo eso, en Kano y en otras capitales y aldeas de África, no podía dejar de pensar en mis alumnos en Barcelona, de clase media, media alta, que -teniéndolo todo- no dan valor a nada.

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Dios os bendiga a todos.

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Continuará...

Producción
El equipo de la Asociación Internacional Science leads to God.

La verdadera Ciencia conduce a Dios

Agradecimento

Estamos muy agradecidos a Dios por haberte dado el interés y la capacidad de colaborar en este proyecto.

Que Dios te bendiga y te ayude en todo.